Amanecí al alba… Desnuda con frío…
En medio de una revolución de perfume, las sábanas se habían replegado a un lado de la cama y las almohadas todas estaban murmurando…
Adormecida entre sueños de ensueño abrí mis ojos moros
Oh! Amanecer así…
Aturdida por el ruido, feliz en el fresco recuerdo de la noche celebrando el año bisiesto… el resplandor de la chispa en la mirada de tu palabra y mi corazón sonriente tocando la luna con los dedos dándote el abrazo lleno de ternura de la bienvenida…
Y, la mano extendida… Abierta hace votos en flor al amigo a celebrar en cada veintinueve
Ese el trato… el trato de paz … las sábanas, las almohadas y de esta Mujer, la que soy, bajo esta bella lluvia llena de poesía
Quedo a un solo latido de distancia!
Mané
Castrovidela29
1 comentario:
Sencillamente delicioso. Tus escritos son pinturas en el lienzo del latido. Besos.
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