No todos somos iguales y no todos tenemos las mismas riquezas...
No todos somos libres, algunos son esclavos de su mente y dan rienda suelta al libertinaje engendrando el caos y la confusión, el odio y la ira...
Elijo la libertad y su alegría, sin temor... haciendo lo qué hay que hacer, respetándome y respetándote, sin esperar...
Elijo la libertad y su alegría, sin temor... haciendo lo qué hay que hacer, respetándome y respetándote, sin esperar...
Sabiendo amarme y protegerme y retirarse a tiempo, antes que los vientos arrastren mi ser como hoja caída seca, infecunda y estéril...
Ser mujer y madre me enseñó a permanecer fiel a los dictados de la conciencia, me hace y distingue como persona y no cosa en medio de la tempestad.
Hoy es un nuevo amanecer, una nueva oportunidad y he redoblado mi optimismo y entusiasmo, los esfuerzos.
Mis ojos moros están levantados, la mirada elevada, clavada en el cielo con el corazón palpitando en paz...
Ser mujer y madre me enseñó a permanecer fiel a los dictados de la conciencia, me hace y distingue como persona y no cosa en medio de la tempestad.
Hoy es un nuevo amanecer, una nueva oportunidad y he redoblado mi optimismo y entusiasmo, los esfuerzos.
Mis ojos moros están levantados, la mirada elevada, clavada en el cielo con el corazón palpitando en paz...
Mané Castro Videla
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