sábado, 31 de diciembre de 2016

Bendecido Año Viejo!


Llego la hora de darse un respiro hondo y profundo
cerrar los ojos y mirarse por dentro
ver la esencia, lo que somos y nos habita
Los seres que amamos
los que están presentes y son parte nuestra
los que  están ausentes
y  aquellos que no son parte nuestra
ni lo serán jamás

Pocas cosas aprendemos en esta ilusión que llamamos vida como el saber vivir... Somos hijos de Dios... del castigo... la culpa... del perdón ...  de la misericordia... Nos perdemos entre laberintos, siempre hacemos revisión de todo lo que somos, decimos y hacemos... de lo nuestro, lo del otro y del espíritu santo... Mandatos de iglesia 
Cruzamos caminos, andamos desiertos... y pedimos a los cielos en soledad para conocernos a nosotros mismos y descubrir los secretos en el peso de la conciencia y encontrar en su silencio, la paz
Siempre se puede un poco más por más dolor y sufrimiento... 
Siempre se puede un poco más cuando se trata de ayudar a los otros y a uno mismo
Siempre se es luz y cuanto más luz se da, menos nos queda 
Debemos dar luz hasta consumirnos y no nos quede más nada. solo morirnos...
Morimos... nacemos y volvemos a morir...
Y somos la rosa del jardín... el picaflor -el alma-  permanente solos con Dios
Juntemos una a una el resto de las fuerzas que nos quede  y el último suspiro de ánimo
que lo hemos logrado... Hemos atravesado y llegado al final del 2016 y eso no es poco.
Hemos muerto y renacido tantas veces... ante la injuria, la blasfemia, el robo, la envidia, el chimento, la violencia, el destierro y no han podido con nosotros, nos hemos mantenido de pié
Ante la pérdida irreparable, ante la injusticia, la ironía de la vida
de todo  eso que no depende de uno y si solo de las palabras y las acciones del otro...
Basta ya! Es hora de  re inventarnos, de escribir y hacer dos listas...
Una  con todo aquello que no queremos ni menos deseamos en nuestras vidas y la quemamos dando espacio a la gratitud de perdonarnos  y entregarles a Dios esas que nos ahogan, nos tienen paralizados y sin consuelo solo él,  solo Dios nos iluminara y disipara todas las neblinas y nos dará fuerzas... fortaleza para sobrellevar aquello que no podemos cambiar...
y  la otra lista es de todo aquello que si queremos, deseamos  que nos encuentre para el  mágico 2017
Tanto  pero tanto tenemos que agradecer, tenemos mucho y la verdad, es que necesitamos mucho menos para vivir... Solo nos necesitamos a nosotros mismos, venimos a aprender...
El resto?! Es accidental... no nos pertenece,  aunque nos cueste y nos duela reconocerlo.
Es lo que uno eligíó y logró  en la gran mayoría de los casos siendo adverbios... rompiendo cadenas y siendo nuestra palabra más que el garabato de la firma ó de un título...
Somos más y lo que somos, nadie nos regalo, nos hemos ganado cada centímentro con nuestro sudor, con coraje y esfuerzo, anudando cada uno de los miedos y saliendo al frente  con la mirada alta por simple amor y locura a la ilusión que llamamos vida.
Uno aprende  siempre y con el tiempo aprende  que nada es nuestro...  Ni lo que decimos ni tampoco pensamos ni creamos... re creamos... Somos tan solo la contradicción pura  en distintos grados del Ser de la Gran biblioteca universal...
Somos esencia y solo sabemos que hemos llegado hasta aqui y  ahora y, este  saberse vivo, nos define.
El resto, nada pero nada nos define...
Sin excusas, sin permisos con autocrítica y en absoluta libertad se es.

Les deseo lo mejor y lo suficiente para que  vuestra alma siempre sea luz viva,!
Graciasss por acompañarme  en este viaje...  !


Mané

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